Hablamos con Paula Espinosa, especialista en Oncología Médica del Hospital General de Valencia y miembro de la Junta Directiva del GECP
“El diagnóstico precoz y la disminución de factores de riesgo, especialmente el tabaco, son medidas claves para cambiar el escenario del cáncer de pulmón”
Has sido galardonada con la beca GECP y Johnson & Johnson por tu proyecto ‘IMPULSO: Impacto de los niveles de ctDNA y la metilación en cáncer de pulmón KRAS-mutado’. ¿Podrías contarnos en qué consiste tu investigación y qué implicaciones podría tener en el tratamiento de estos pacientes?
En el Hospital General de Valencia tenemos una larga trayectoria en biopsia líquida. Sabemos que los tumores liberan células al torrente circulatorio. Somos capaces de identificar y analizar el ADN tumoral con el fin ver alteraciones moleculares que podemos tratar de manera dirigida. La biopsia líquida es un método no invasivo (una analítica de sangre) que nos permite monitorizar la respuesta al tratamiento, identificar mecanismos de resistencia precozmente y además es capaz de capturar la heterogeneidad tumoral. Nuestro proyecto está enfocado en pacientes con cáncer de pulmón metastásico con una mutación concreta en KRAS (KRASG12C), para la que actualmente existen fármacos dirigidos aprobados en segunda línea (sotorasib y adagrasib). El tratamiento estándar de primera línea está basado en la combinación de quimioterapia e inmunoterapia. El objetivo de nuestro trabajo es analizar cómo el seguimiento de la mutación mediante PCR digital en biopsia líquida nos ayuda a monitorizar la respuesta al tratamiento. Mediante esta buscamos tratar de analizar patrones de metilación que puedan estar implicados en la evolución tumoral como mecanismos pronósticos o predictivos de respuesta al tratamiento.
El cáncer de pulmón sigue siendo uno de los tumores con mayor impacto en términos de mortalidad. Desde la perspectiva de la Oncología Médica, ¿cómo ha cambiado el enfoque terapéutico en los últimos años y qué avances han marcado la diferencia en la supervivencia de los pacientes?
La realidad es que no solo ha cambiado el tratamiento en los últimos años, sino que está en constante cambio y seguirá haciéndolo. Los dos hitos que han marcado la diferencia han sido la incorporación de la inmunoterapia al arsenal terapéutico en enfermedad avanzada y localizada y la identificación de dianas moleculares concretas en el tumor que podemos tratar de manera dirigida.
“Gracias a las estrategias neoadyuvantes, perioperatorias y adyuvantes incorporando la inmunoterapia y/o terapias dirigidas, curamos más pacientes”
En el ámbito de los tratamientos oncológicos, ¿cuáles han sido los avances más significativos y qué desafíos persisten?
En cáncer de pulmón se ha abierto la puerta a curar más pacientes en estadios precoces. Hasta ahora incluso con enfermedad localizada la supervivencia era pobre, por ejemplo, en estadios IIB hablábamos de supervivencias a 5 años en torno al 50%. Gracias a las estrategias neoadyuvantes, perioperatorias y adyuvantes incorporando la inmunoterapia y/o terapias dirigidas, curamos más pacientes.
Persisten muchos desafíos, aún hay subgrupos donde el beneficio de estas estrategias es limitado, especialmente en carcinoma epidermoide y pacientes con PD-L1 negativo donde tenemos aún un gran margen de mejora por delante. También en carcinoma microcítico ha habido avances significativos y hemos visto como hay estrategias que aumentan la supervivencia en estadio localizado, como la adición de durvalumab tras quimio-radioterapia en base al ensayo clínico ADRIATIC y en escenario metastásico con fármacos como el tarlatamab dirigido contra la proteína DLL3.
Uno de los desafíos más importantes sería conseguir que se agilizara el proceso de aprobación de fármacos sin perder rigor en los procesos. Poder tratar a un paciente con un fármaco que sabemos que funciona de una manera más precoz.
La investigación en biomarcadores está transformando la personalización de los tratamientos. ¿Cómo está influyendo la identificación de nuevos biomarcadores en la elección de terapias para el cáncer de pulmón? ¿Qué avances recientes consideras más prometedores?
Como he dicho es uno de los mayores avances en los últimos años. Es fundamental identificar biomarcadores que nos permiten desescalar tratamiento, como el uso de inmunoterapia sin quimioterapia en algunos pacientes con alta expresión de PD-L1. En el caso de alteraciones moleculares consideradas driver nos ayuda a seleccionar un tratamiento más eficaz y en general más cómodo para el paciente.
En los últimos años hemos tenido terapias dirigidas que han demostrado beneficios en momentos más precoces de la enfermedad, como el caso de osimertinib en pacientes con mutación en EGFR en escenario adyuvante (ADAURA) o tras quimio-radioterapia (LAURA) y alectinib tras cirugía en pacientes con fusiones en ALK (ALINA).
“En España hay un muy buen nivel de investigación en oncología”
España ha dado pasos importantes en la investigación del cáncer de pulmón. ¿Cómo valorarías el nivel actual de la investigación en nuestro país? ¿Estás participando en algún estudio del GECP? ¿En cuál?
Sinceramente, creo que en España hay un muy buen nivel de investigación en oncología. Somos pioneros en una de las estrategias que han cambiado la práctica clínica en los últimos años, como es el tratamiento de combinación de inmunoterapia con quimioterapia neoadyuvante en los ensayos clínicos NADIM, liderado por el Dr. Provencio. Es destacable el nivel de desarrollo de investigación, teniendo en cuenta lo difícil que es en España dedicarse a ello en comparación con otros países de la Unión Europea o Estados Unidos. En el Hospital General de Valencia hemos participado en muchos ensayos clínicos del GECP como NADIM o NADIM-Adjuvant entre otros. Actualmente tenemos abiertos los ensayos clínicos MERIT, DUMAS y PEERS y estamos pendientes de abrir otros este año. Espero que sigamos participando en implantar estos estudios porque es bueno para los pacientes.
La prevención sigue siendo un pilar fundamental en la lucha contra el cáncer de pulmón. ¿Cómo valoras las actuales medidas contra el tabaquismo y otros factores de riesgo como el vapeo? ¿Consideras que son suficientes o hay margen de mejora?
Hay mucho margen de mejora. Lo que diferencia al cáncer de pulmón de otros tumores es la ausencia de un screening implementado en aquellos pacientes de riesgo y ya tenemos datos que nos dicen que es una medida eficaz. Esto hace que los pacientes se diagnostiquen mayoritariamente con enfermedad avanzada donde la posibilidad de curación es muy baja. El diagnóstico precoz y la disminución de factores de riesgo, especialmente el tabaco, son medidas claves para cambiar el escenario del cáncer de pulmón. Se necesitan estrategias accesibles para los pacientes que quieren dejar de fumar, antes de cualquier diagnóstico de cáncer, pero también a aquellos pacientes que han sido diagnosticados y quieren dejar el hábito tabáquico. Se necesita ayuda tanto farmacológica como no farmacológica. El soporte y seguimiento adecuado por especialistas para conseguir este objetivo.
“El diagnóstico precoz y la disminución de factores de riesgo, especialmente el tabaco, son medidas claves para cambiar el escenario del cáncer de pulmón”
La calidad de vida de los pacientes es un aspecto clave en el tratamiento oncológico. Desde tu experiencia, ¿qué estrategias pueden mejorar el manejo de los efectos secundarios de las terapias? ¿Qué papel juegan las unidades de soporte en este proceso?
Desde oncología tenemos que conocer estos efectos adversos, saber prevenirlos y tratarlos, tanto el personal médico médicos como enfermería. Tenemos que educar a los pacientes en identificar ciertos efectos secundarios potencialmente graves. También debemos ser accesibles para ellos. Es esencial facilitar un teléfono o un email al que recurrir de manera rápida y desde luego valorarles si necesitan adelantar la consulta por un efecto adverso. La accesibilidad es clave.
En mi experiencia el ejercicio físico ayuda muchísimo a los pacientes en cualquier escenario de la enfermedad. Los programas promovidos por asociaciones como la Asociación de Pacientes de Cáncer de Pulmón, la Asociación Española Contra el Cáncer, incluso otras iniciativas de ámbito privado son muy agradecidas por los pacientes. Probablemente un asesoramiento de medidas higiénico-dietéticas sin caer el “falsos mitos” y guiada por especialistas ayude al control sintomático, la autopercepción y adaptación a la enfermedad y al manejo de los efectos secundarios.
Aparte están las unidades de soporte de cuidados paliativos en momentos finales de la enfermedad, que deberían seguir a los pacientes desde un momento precoz de la enfermedad, siempre que tengan necesidades de control sintomático. Estas unidades no deberían cuestionarse ni limitarse al momento final de la enfermedad. Claramente aportan calidad de vida a los pacientes, minimizan las visitas al hospital y las largas esperas en urgencias. Este también es un desafío importante, conseguir que las unidades de soporte o cuidados paliativos domiciliario llegue a todos los puntos de España y antes a nuestros pacientes.
“El ejercicio físico ayuda muchísimo a los pacientes en cualquier escenario de la enfermedad”
Para finalizar, una pregunta personal. ¿Qué te motivó a especializarte en oncología médica? ¿Qué es lo que más te apasiona de tu especialidad?
La realidad es que no lo tengo muy claro. Los médicos elegimos la especialidad desde mi punto de vista sin saber muy bien lo que elegimos. Creo que lo que más me gustaba en ese momento era lo importante que es la parte clínica en el buen manejo de los pacientes, la relación tan cercana que se establece con el paciente, familiares y todo lo que puedes ayudarles durante este proceso. Lo que sé es que no me equivoqué, es una especialidad muy exigente y eso es algo que cualquier médico que elija esta especialidad tiene que saber. Está en constante cambio y eso exige estar constantemente actualizado y en áreas cada vez más complejas para los clínicos. Pero esto es quizá lo más estimulante y lo más atractivo de la especialidad, poder dedicar parte de tu trabajo a investigación y desarrollo de nuevas estrategias terapéuticas que pueden llegar a traducirse en beneficios para el paciente.
BIO
Nací en: Valencia
Me formé en: Hospital 12 de Octubre en Madrid
Trabajo en: Hospital General de Valencia
Formo parte del GECP desde: 2024
Lo que más me gusta es: Estar con mis amigos y mi familia
Me gustaría desterrar: La diferencia de oportunidades, en la vida, en Oncología… me gustaría que todos tuviéramos las mismas oportunidades para poder desarrollarnos desde el punto de vista personal y profesional.
Una curiosidad: Mi propósito para 2025 es hacer más ejercicio, se lo recomiendo a los pacientes, pero creo que algunos hacen mucho más que yo.