El GECP advierte del olvido institucional que sufre el cáncer de pulmón
Día Mundial contra el Cáncer.
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El Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP), formado por 400 expertos de toda España, ha puesto de relieve en un informe que pese a ser el tumor con más impacto social en España es el que menor inversión y soporte público recibe
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No sólo ha ido perdiendo peso en las redes públicas de investigación, sino que además ha caído el número de trabajos de investigación en este tumor becados por la Administración
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Más de 21.200 personas mueren cada año en España como consecuencia del cáncer de pulmón, lo que supone la suma de las defunciones causadas por colon y mama. Esto se traduce en un coste social cifrado en más de 1.250 millones de euros
Con motivo de la celebración del Día Mundial contra el Cáncer, el Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP) formado por 400 especialistas de toda España, ha querido poner de relieve que el cáncer de pulmón, pese a ser el tumor con más impacto social en España, es el de menor inversión y de los que menos soporte público a la investigación recibe. “Es un tumor estigmatizado y olvidado que año tras año ocupa el primer puesto en mortalidad. Es urgente que se convierta en una prioridad social”, ha destacado el doctor Mariano Provencio, presidente del GECP y jefe de Oncología del Hospital Puerta de Hierro.
Gasto vs supervivencia
Así, los especialistas del GECP recuerdan que en la Unión Europea se ha evidenciado que el montante invertido en políticas sanitarias contra el cáncer no sólo va aparejado a una mayor incidencia del tumor, sino también a una mayor supervivencia al mismo. En este sentido el gasto medio en España por ciudadano y año en cáncer de pulmón es de 5€, un 30% inferior a la media europea y muy por debajo de otros países. “Además en España los presupuestos sanitarios de la Comunidades Autónomas muestran variaciones sustanciales en el gasto por ciudadano, variaciones que pueden superar el 40%.”, asegura el doctor Provencio.
Soporte a la investigación
El soporte a la investigación también es otro de los pilares que se ha resentido en los últimos años. “En España la financiación pública para la investigación clínica del cáncer de pulmón es prácticamente inexistente. Y no sólo eso. Una reciente encuesta a los miembros del Grupo reveló que más de un 80% de los miembros consultados considera que deben destinarse más recursos y relatan las dificultades para el desarrollo de investigaciones independientes, así como la dependencia de la industria farmacéutica”, explica el presidente del GECP.
El informe elaborado por el GECP también pone de manifiesto que el cáncer de pulmón ha ido perdiendo peso en las Redes Temáticas de Investigación Cooperativa: de los 50 grupos de investigación que integran el CIBER (Centro de Investigación Biomédica en Red) sólo el 8% son de cáncer de pulmón, la mitad que de hematología y casi la mitad que de mama y colorrectal. “Sucede lo mismo con el total de trabajos de investigación en cáncer becados este año por el Instituto Carlos III: sólo un 11% son de pulmón”, detalla Provencio.
Un olvido que también afecta al mecenazgo privado a la investigación. Según Provencio, “la estigmatización que sufre le aleja de estas ayudas que sí están recibiendo otros tumores con mayor proyección mediática”.
Impacto Social
Más de 21.200 personas mueren cada año en España como consecuencia del cáncer de pulmón, lo que supone la suma de las defunciones causadas por colon y mama. Esto se traduce en un coste social cifrado en más de 1.250 millones de euros si se tiene en cuenta el impacto de la mortalidad y morbilidad que deja tras de sí la enfermedad. “Es un tumor de gran impacto y poca visibilidad”, ejemplifica el doctor Bartomeu Massuti, secretario del GECP y jefe de oncología del Hospital General de Alicante. “Sigue siendo el más mortal y aglutina el 20’55% de todas las defunciones por cáncer en España”, destaca Massuti.
Por último los especialistas del GECP recalcan que sin inversión y apoyo a la investigación no habrá mejoría en este tumor. “La medicina personalizada es la que está permitiendo mejorar los resultados del tratamiento del cáncer, especialmente en el caso del cáncer de pulmón, donde más repercusión ha tenido esta estrategia. Esta vía requiere investigación en paralelo a nivel genómico, desarrollo de nuevos fármacos y verificación de resultados en la población identificada”, concluye el secretario del GECP.