Hablamos con Alberto Ruano, coordinador de epidemiología del GECP
“Dentro de cuatro o cinco años vamos a ver cómo la mortalidad por cáncer de pulmón en mujeres supera a la mortalidad por cáncer de mama”
¿Qué le llevó a especializarse en cáncer de pulmón?
Comencé el estudio del cáncer de pulmón en 1998 porque mi director de tesis hacía investigación epidemiológica de este tipo de cáncer y me pareció un campo muy interesante. Yo soy investigador y puedo decir que, casi 20 años después, a pesar de todos los avances que han surgido en la última época, no tenemos más respuestas, sino más preguntas. Contrariamente a lo que se pueda pensar, a pesar de la elevada incidencia del cáncer de pulmón, los factores de riesgo de este cáncr, eexcepto el tabaco, están poco estudiados. Creo que es importante ver cómo otros factores de riesgo, como la ocupación o la exposición a radón, pueden influir en la aparición de esta enfermedad.
En su opinión, ¿cómo ha cambiado el abordaje del cáncer de pulmón desde sus inicios hasta la actualidad?
Yo no hago asistencia médica pero sí que he observado que se ha experimentado un avance importante en lo que se refiere a la disección molecular de la enfermedad y a la detección de dianas específicas sobre las que puede haber arsenal terapéutico. Aún hay que avanzar mucho en la identificación de dianas terapéuticas, pues hoy por hoy aún representan un porcentaje pequeño de los pacientes que tienen cáncer de pulmón. De hecho, la supervivencia del cáncer de pulmón microcítico es un dato evidente de que que aún queda mucho camino por recorrer.
“El cáncer de pulmón es una enfermedad
principalmente de origen ambiental”
En ese sentido, ¿cree que el futuro está en la búsqueda de nuevos biomarcadores?
Sí lo creo. A medida que podamos avanzar más en el conocimiento de la enfermedad podremos tener mejores tratamientos, más eficaces y más seguros. Pero también es muy importante poder predecir mejor quiénes van a desarrollar un cáncer de pulmón. Hoy por hoy ya vemos casos de sujetos fumadores que, debido a su susceptibilidad genética, pueden tener más riesgo de enfermar frente a otros que tienen menos riesgo, fumando todos la misma cantidad de tabaco. Quizá nos falta un poco de combinación global de lo que son genes de susceptibilidad junto a polimorfismos en genes reparadores de tumores de manera que podamos predecir con más exactitud por que unos grandes fumadores desarrollan cáncer de pulmón y otros no.
¿Existe algún modo de prevenir que personas que genéticamente están más predispuestas a padecer un cáncer de pulmón y, además, son fumadoras, no enfermen?
En estos casos se podrían diseñar mensajes ad hoc para estas personas, mensajes que existen para otras enfermedades, como por ejemplo las cardiovasculares, donde tenemos muchas calculadoras de riesgo. Desde luego, si a una persona fumadora se le dice que tiene cinco veces más posibilidades de desarrollar la enfermedad que otra persona que fume lo mismo, pues igual abandonaría el consumo. A través de las investigaciones que hemos hecho nos hemos dado cuenta de que el cáncer de pulmón es una enfermedad principalmente de origen ambiental y que cuando hay confluencia de muchos factores como por ejemplo radón, consumo de tabaco y ocupación, el riesgo de enfermar se multiplica en gran medida. Hay estudios que confirman que personas que han trabajado en ocupaciones de riesgo para cáncer de pulmón y que son grandes fumadoras tienen hasta 200 posibilidades más de tener cáncer de pulmón que una persona que no ha fumado nunca y que no ha trabajado en ocupaciones de riesgo. Son mensajes que hay que trasladar a la población y también a los políticos: hace falta mas financiación para que la gente trate de dejar de fumar porque en España se va a replicar la epidemia de consumo de tabaco en EEUU, en donde hace ya 30 años la mortalidad por cáncer de pulmón en las mujeres superó a la mortalidad por cáncer de mama y esto lo vamos a ver aquí dentro de 4-5 años aproximadamente.
“Hace falta más financiación para que
la gente trate de dejar de fumar”
¿Cuáles diría que son las principales tendencias hoy en día en cáncer de pulmón?
Entré en el GECP hace 4 años y me quedé muy sorprendido positivamente de cómo se hacen las cosas. Lo que he observado es que la respuesta a muchísimas preguntas están en los estudios colaborativos que ayudan a aumentar los tamaños de las muestras, de manera que podamos hacer frecuente lo infrecuente. Quiero decir, por ejemplo, que con tipos histológicos que son poco frecuentes, como el microcítico, gracias a trabajar de manera colaborativa nos permite tener muestras mayores y por lo tanto más conocimiento para desarrollar medicamentos específicos. Esta línea habría que seguirla con la creación de grandes consorcios que puedan hacer estudios de asociación genómica completa para poder conocer qué genes pueden estar influyendo en la aparición y en la mejor o peor respuesta del cáncer de pulmón a ciertos tratamientos.
¿Qué aspectos cree que se pueden mejorar hoy en día?
Creo que es necesario tener indicadores acerca de cómo es la calidad asistencial que están recibiendo los pacientes con cáncer de pulmón y sobre esto creo que el Registro de Tumores Torácicos puede ser una herramienta muy importante. También tengo mucho interés en ver si se está produciendo una muerte digna en pacientes con cáncer de pulmón: si fallecen en un entorno hospitalario o familiar. Sobre esto también hay que avanzar… También saber cuántos de los casos diagnosticados en los hospitales están yendo a los Comités de Tumores, cuáles son los tiempos de tratamiento, si las vías rápidas que tenemos implantadas están siendo realmente rápidas o donde pueden estar estos cuellos de botella… Podemos avanzar en muchos aspectos.
“En España se va a replicar la epidemia
de consumo de tabaco en EEUU”
¿Cómo valoraría la investigación en cáncer de pulmón en España?
Yo creo que es muy buena y que no tenemos nada que envidiar a lo que se esta haciendo en otros países e incluso me atrevería a decir que con menos recursos vamos por delante de muchos países de nuestro entorno. Podríamos estar mejor si hubiese más financiación pública para hacer más investigación en cáncer de pulmón. Por ejemplo, en Estados Unidos están poniendo muchos recursos públicos en investigación. En el año 2013/14 se declaró el cáncer de pulmón microcítico como una enfermedad recalcitrante por parte del Congreso lo cual supuso una inyección de fondos a investigación para este subtipo histológico que tendrán resultado en los años próximos.
¿Cree que las nuevas generaciones llegan lo suficientemente preparadas para investigar?
Doy clases en la Facultad de Medicina y sí encuentro que hay cierta falta de información en el grado de Medicina actual en tareas de investigación. Creo que un médico tiene que tener una dualidad asistencial e investigadora. También creo que hay cierta falta de formación en todo lo que es el componente humano en la Medicina. Antes se hablaba de la medicina social pero ahora tenemos una medicina muy tecnificada, olvidando los aspectos humanos de los enfermos y sus circunstancias. Son cosas en las que hay que avanzar.
“Es muy importante poder predecir mejor
quién va a desarrollar cáncer de pulmón”
¿Existen rasgos diferenciales de la situación del cáncer de pulmón en su comunidad autónoma?
En Galicia en cuanto a cuestión asistencial tenemos los mismos recursos que en otras CCAA, pero la epidemiologia es algo diferente. En Galicia hay mucho radón, que es el segundo factor de riesgo de cáncer de pulmón después del tabaco y el primero en nunca fumadores, como dice la OMS y la agencia de protección ambiental americana.
“Factores de riesgo como la ocupación o la exposición al
radón pueden influir en la aparición del cáncer de pulmón”
¿Cómo ve el futuro del cáncer de pulmón? ¿Lograremos vencerlo?
Creo que todo dependerá de cuanto seamos capaces de avanzar en la predicción de riesgo de cáncer de pulmón y en la predicción de la respuesta. Cuando hablamos de predicciones hablamos de tener modelos matemáticos basados en muchos pacientes y mientras no seamos capaces de alcanzar esto, los avances serán muy lentos. También debemos ser capaces de concienciar a las personas jóvenes que no deben empezar a fumar y los que ya lo hacen deben abandonar el consumo de tabaco de manera inmediata. Por último, en el ámbito del screening de cáncer de pulmón se pueden generar más problemas que beneficios. No podemos olvidar que las políticas de screening van dirigidas a gente sana y esto significa que a una parte muy pequeña se les va a detectar la enfermedad y a un número importante de personas sanas se les generará un problema que antes no tenían. Si los recursos asignados a un potencial screening fueran aplicados a políticas de reducción del consumo de tabaco, financiación de tratamientos para dejar de fumar o a facilitar la accesibilidad a la inmunoterapia, lograríamos un mayor coste oportunidad de los escasos recursos existentes.
BIO
Nací en: Santiago de Compostela
Me formé en: la Universidad de Santiago de Compostela. Realicé estancias en Harvard y en Brown en tres ocasiones, una de ellas con una beca Fulbright para investigadores senior del Departamento de Estado de USA
Trabajo en: Universidad de Santiago donde soy profesor titular de Medicina Preventiva y Salud Pública
Formo parte del GECP: desde hace 4 años
Lo que más me gusta es: estar con mi familia, viajar y jugar al ajedrez
Me gustaría desterrar: la envidia
Una curiosidad: soy un poco hipocondríaco