Hablamos con el Dr. Emilio Esteban, jefe de Oncología Médica del HUCA
HABLAMOS CON EL DR. EMILIO ESTEBAN, jefe de Oncología Médica del HUCA (Hospital Universitario Central de Asturias)
“La victoria al cáncer de pulmón es un partido a jugar a largo plazo”
¿Por qué se especializó en Oncología y, más concretamente, en cáncer de pulmón?
Fue un reto que me propuse, luchar, presentarte a la primera línea de una batalla que en aquella época muchos daban y dan por perdida.
¿Cómo ha cambiado el abordaje del cáncer de pulmón desde sus inicios hasta la actualidad?
La oncología médica es la que ha cambiado la perspectiva que se tenía del cáncer en general. En particular con el carcinoma de pulmón nos ha enseñado una metodología de trabajo en equipos multidisciplinarios en la práctica clínica para optimizar resultados protocolizando actuaciones terapéuticas y ensamblando la investigación, desde lo básico preclínico-morfológico-molecular, a la aplicación clínica.
¿Cuáles son los nuevos patrones o tendencias del cáncer de pulmón?
Como en todo tipo de patología que afecta al ser humano, se busca la caracterización molecular y alteraciones genéticas de cada tumor en cada paciente, así como en conocer los polimorfismos que expliquen la farmacogenómica de un fármaco en concreto en ese paciente, si le produce beneficio o por el contrario toxicidad.
Según su criterio, ¿cuáles han sido los principales avances en cáncer de pulmón en los últimos años?
En primer lugar, se ha avanzado en prevención, con políticas de erradicación del hábito tabáquico que ahora deberían ir acompañadas de forma más entusiasta con el diagnóstico precoz, seleccionando poblaciones de riesgo para un cribado eficiente. En segundo lugar, se ha avanzado en modalidades terapéuticas quirúrgicas y radiológicas curativas menos agresivas para el paciente. En tercer y último lugar destacaría un avance en el tratamiento sistémico basado en una caracterización molecular, que han servido para distinguir poblaciones con mejor pronóstico y subsidiarias de tratamientos específicos entrando en la era de la medicina de precisión o personalizada.
¿Qué aspectos cree que todavía se pueden mejorar?
Debemos seguir ahondando en políticas de erradicación del hábito tabáquico. Además hay que tener en cuenta la contaminación en nuestra sociedad, que también se ha demostrado que puede ser responsable de una mayor incidencia del cáncer de pulmón. Además, debemos seguir apostando por el diagnóstico precoz y ahondar en la caracterización de alteraciones moleculares y en este momento también inmunológicas, que sirvan para desarrollar agentes antitumorales de precisión.
¿Cómo valora las medidas de prevención primaria del cáncer de pulmón? ¿Cree que se está haciendo lo suficiente para frenar el tabaquismo?
Mientras se siga identificando como un beneficio económico en forma de recaudar impuestos con las sustancias o agentes productores de cáncer, la batalla estará perdida.
Nuestra sociedad debe estar dispuesta y apostar por la educación en hábitos y comportamientos saludables. Deporte, no fumar, no contaminar, dieta adecuada…., todo ya está hablado y repetido. Ahora hace falta entrar a la acción con decisión y de forma permanente.
¿Está participando en la actualidad en algún estudio del GECP? ¿En cuál?
No, pero todo el equipo Oncológico del Hospital Universitario Central de Asturias está preparado y dispuesto a ello por el peso que el GECP tiene tanto a nivel nacional como internacional.
¿Cómo valoraría la investigación en cáncer de pulmón en España? ¿Qué herramientas o palancas la ayudarían a mejorar?
Mi valoración es de sobresaliente por el número de publicaciones que se realizan de forma internacional. La inversión en estudios preclínicos y clínicos con financiación independiente ayudaría a aspirar a la excelencia.
¿Cree que las nuevas generaciones llegan lo suficientemente preparadas a los Servicios de Oncología? ¿Qué echa de menos en materia formativa?
La formación médica general de las facultades de medicina en España es buena y cada vez más se va notando que la asignatura de Oncología forma parte de la formación de médicos, ahora falta que existan más profesores titulares y cátedras con perfil de oncología médica.
¿Podría aportarnos algunas pinceladas de la situación del tumor en su Comunidad? ¿Existen rasgos diferenciales?
Si hablamos de cáncer de pulmón en el Principado de Asturias debemos destacar que estamos en las cifras más altas en incidencia y mortalidad de Europa y España, un aliciente más para esforzarnos en nuestra comunidad en la prevención, diagnóstico precoz, tratamiento multidisciplinar e investigación y así convertirnos en vanguardia en todos esos aspectos.
Y por último, ¿cómo ve el futuro del cáncer de pulmón? ¿lograremos vencerlo?
Me gustaría dar un mensaje de esperanza porque por una parte la incidencia está disminuyendo con la reducción del hábito tabáquico en nuestra sociedad y la supervivencia está mejorando de forma progresiva con los avances diagnósticos y terapéuticos añadiendo calidad de vida a las personas. Hablar de victoria pasa por cambiar nuestro estilo de vida y nuestro código genético, intuyo por ello un partido a jugar a largo plazo.